Desde el estallido de la pandemia de la COVID-19, el turismo ha experimentado una transformación significativa. Los viajeros, ávidos de nuevas experiencias, han redescubierto el encanto de los destinos rurales, buscando alejarse del bullicio de las ciudades y conectar con la naturaleza. Este cambio de paradigma ha impulsado el auge del alquiler vacacional en zonas rurales, convirtiéndose en una tendencia en crecimiento que está redefiniendo el panorama turístico
Según afirman en turismorural.com tras más de 20 años de trayectoria en el sector, existe una gran mayoría de viajeros que manifiestan su disposición a pagar más por hospedarse en alojamientos sostenibles. Esta tendencia refleja una creciente conciencia ambiental entre los turistas, que valoran cada vez más la preservación del entorno natural.
Factores clave en la decisión de compra
La reserva online, el precio, las reseñas y las fotografías juegan un papel crucial en el proceso de decisión de compra del viajero actual. La comodidad de poder reservar desde cualquier lugar, junto con la transparencia en los precios y la opinión de otros usuarios, influyen en gran medida en la elección del alojamiento.
Épocas de mayor demanda en turismo rural
Las fechas más demandadas para el turismo rural se concentran en momentos clave del año. En primer lugar, destaca la Semana Santa, seguida del periodo de junio, coincidiendo con el inicio del verano y las vacaciones. Curiosamente, en última posición se encuentra finales de febrero, asociado a periodos no lectivos en algunas regiones.
El impacto de la pandemia en el turismo
La pandemia de la COVID-19 ha tenido un impacto sin precedentes en el sector turístico a nivel mundial. Sin embargo, el turismo rural ha emergido como uno de los sectores con mayor capacidad de adaptación. Las medidas de prevención adoptadas han llevado a una mayor valoración de los espacios al aire libre y el contacto con la naturaleza, impulsando así el ecoturismo y el turismo rural.
Recuperación y oportunidades en el sector
A pesar de los desafíos, el turismo rural ha demostrado ser resiliente, encontrando en la demanda de experiencias auténticas y sostenibles una oportunidad para crecer. Según el informe del Observatorio de Turismo Rural, el turismo rural ha experimentado excelentes resultados, consolidándose como una opción cada vez más atractiva para los viajeros en busca de desconexión y autenticidad.
El auge del alquiler vacacional en zonas rurales refleja una tendencia en crecimiento impulsada por la búsqueda de experiencias auténticas, sostenibles y en contacto con la naturaleza. En un mundo cada vez más digitalizado, el turismo rural se presenta como una opción que ofrece la oportunidad de desconectar y reconectar con lo esencial, proporcionando experiencias memorables y enriquecedoras para los viajeros de hoy en día.
